Las megatendencias son fuerzas potentes y transformadoras que cambian la economía global, el mundo empresarial y la sociedad, y que cuentan con el potencial de afectar a nuestras vidas e influir en los resultados de nuestras decisiones de inversión.
Algunas megatendencias llevan años entre nosotros y otras empiezan ahora a mostrar su impacto en la economía. Este es el caso del cambio demográfico y social.
El incremento y envejecimiento de la población mundial está cambiando de forma fundamental las necesidades de las personas. En la revisión de 2015 del informe “World Population Prospects” (Perspectivas de la población mundial) la ONU indicaba que, para 2030, la población del planeta se habrá incrementado en 1.200 millones de personas. Sin embargo, la distribución de estos más de mil millones de personas no será proporcional entre grupos de edad o regiones: el 30% de estas personas tendrán 65 años o más y, para 2050, el 50% del crecimiento total de población provendrá, muy probablemente, de África.
Concretamente la inversión en envejecimiento de la población, incorpora compañías que están posicionadas para aprovechar las crecientes necesidades asociadas al aumento de la población mundial de mayor edad. Esta temática cubre una amplia variedad de sectores, desde el sector salud y farmacéutico hasta productos financieros, servicios de cuidado a la tercera edad y productos de consumo, tanto de compañías de países desarrollados como de países emergentes.
“De cara a 2030, se espera que el 13% de la población mundial pueda tener más de 65 años, lo que equivale a 1.000 millones de personas por encima de ese umbral. Este dato se ha convertido en una megatendencia que ya está afectando la forma en que vivimos, en que trabajamos y en cómo invertimos, por ello debemos prepararnos de la mejor manera posible. BlackRock, en 2016, lanzó un producto que pretende aprovechar estas oportunidades derivadas del envejecimiento de la población, el iShares Ageing Population UCITS ETF (Aged). El ETF invierte en empresas bien posicionadas para beneficiarse de las crecientes necesidades de una población mundial envejecida. El producto abarca sectores que van desde compañías de seguros sanitarios y farmacéuticas hasta empresas financieras, así como aquellas centradas en la atención de personas mayores y los servicios al consumidor.”
André Themudo, miembro del equipo de ventas de BlackRock en Iberia
