El simposio de Jackson Hole, que tendrá lugar esta semana del 26 al 28 de agosto, centra las miradas de los inversores, ya que esperan conocer más pistas sobre el rumbo que tomará la Fed para equilibrar la lucha contra la inflación y el menor impacto sobre el crecimiento económico. A continuación, os dejamos con las primeras opiniones de distintas gestoras.

Jack Janasiewicz, estratega de Natixis IM Solutions

“No hay grandes cambios de política. No hay nada que pueda sorprender. Sólo un intento de replantear las perspectivas de inflación y tipos“, señala el experto sobre qué esperar de esta reunión anual.
“Todas las miradas estarán puestas en el presidente de la Reserva Federal de EE.UU., Jay Powell“, indica Janasiewicz. “Esperen que los comentarios de Powell tranquilicen al mercado sobre el compromiso de la Fed de frenar la inflación, pero conservando la flexibilidad para ajustarse en consecuencia según lo permitan los datos. Es probable que Powell intente hacer hincapié en un ritmo más lento de subidas, pero también en un período de tiempo más largo en territorio restrictivo, quitando un poco de viento a la narrativa del pivote dovish”, sobre lo que Janasiewicz advierte que “tampoco implica un cambio en el tipo de interés final. Simplemente significa tipos más altos durante más tiempo, algo que el mercado no está valorando actualmente“.
El experto señala también que “el punto más importante es que el sesgo de riesgo de la Fed seguirá inclinándose hacia un sesgo de halcón […] Es más probable que la Reserva Federal responda de forma agresiva a las sorpresas de inflación que se produzcan que de forma moderada a la debilidad del crecimiento“.

Cristina Gavín, responsable de Renta Fija de Ibercaja Gestión

Cristina Gavín señala que, este año, el simposio cobra especial relevancia ante el escenario inflacionista en el que nos movemos desde hace meses y que “ha forzado a los principales bancos centrales a nivel mundial a iniciar un proceso de subidas en el tipo de intervención a un ritmo mucho más acelerado de lo que se anticipaba a comienzos de este año”.
El interés se centra, destaca la experta, en los mensajes que transmitan los Bancos Centrales de las dos principales áreas económicas, EEUU y Europa, que afrontan esta reunión desde un tono claramente divergente.
En el caso de la Reserva Federal, Gavín comenta que el último dato de inflación publicado hace dos semanas ha dado “un respiro” a la economía norteamericana, al situarse dos décimas por debajo de lo esperado.
“Aunque la bajada ha sido debida fundamentalmente a la relajación en los precios de las materias primas, lo cierto es que podría permitir un cierto alivio en el proceso de subida de tipos en EEUU y anticipar, si la tendencia se mantiene, un cambio de sesgo por parte de la Fed en un periodo de tiempo relativamente corto. Será por tanto muy relevante prestar atención a la valoración que hace Powell de estos últimos datos de precios conocidos y las claves que sobre política monetaria pueda transmitir en sus declaraciones. Es poco probable, no obstante, que aclare si la próxima subida va a ser de 50 o de 75 puntos básicos, y será necesario esperar a los datos adelantados de precios y de empleo de comienzos de septiembre para tener una visión más clara del movimiento”.
Cristina Gavín, responsable de Renta Fija de Ibercaja Gestión
En cuanto al BCE, el dato de inflación europeo que conocíamos la semana pasada, marcaba un nuevo récord, lo que para Gavín demuestra que “las presiones inflacionistas no se han mitigado” y que es más que probable que volvamos a ver otra subida adicional de 50 pb en septiembre.
David Norris, gestor de TwentyFour AM (boutique de Vontobel AM)

Tras los datos positivos del IPC de julio, los inversores prevén que la Reserva Federal podría estructurar un aterrizaje suave. Sin embargo, la publicación de las actas de la última reunión de la Fed parece haber enfriado ese sentimiento. Aunque hay muchas señales económicas que podrían interpretarse como un indicio de que la inflación está tocando techo, todavía hay demasiadas variables que podrían cambiar la narrativa, señala Norris.
Se espera que Jerome Powell continúe con su discurso sobre la lucha contra la inflación, al tiempo que disuade a los mercados de la idea de que la Fed ha dado un giro de tuerca. Su mensaje principal girará en torno a la determinación de la Fed de controlar la inflación, que es su objetivo principal, incluso si dicha política corre el riesgo de empujar la economía estadounidense a la recesión. En vísperas del discurso de Powell, los mercados de tipos han retrocedido en lo que se refiere al yied, con los yield del Tesoro a diez años envueltos nuevamente en torno al 3%. Por lo tanto, los mercados están anticipando una declaración con un tono más duro por parte de Powell en la línea de una “narrativa más alta durante más tiempo”. La reacción inicial del mercado puede ser moderada, con la postura hawkish reflejada en los rendimientos del Tesoro, junto con el entendimiento de que la política de la Fed será dictada sobre la base de los datos y reunión por reunión.
La última cifra principal del IPC fue alentadora, pero también puso de manifiesto que el componente de vivienda de los datos de inflación (OER y alquiler) sigue siendo un factor importante. Las tarifas aéreas, los precios de los coches usados y el descenso de los precios de la gasolina en los surtidores fueron también factores que contribuyeron a la reducción del IPC. Sin embargo, debemos ser conscientes de que el gasto de consumo personal básico (PCE) es el barómetro preferido de la Fed y que esperamos estas últimas cifras a finales de esta semana, destaca este analista.
“Creemos que la actual política de la Reserva Federal está orientada a luchar contra la inflación abordando la demanda agregada a través de unos tipos más altos y, aunque se observan signos de ralentización de la economía, la continua fortaleza del mercado laboral estadounidense y del gasto de los consumidores ha puesto de manifiesto que cualquier recesión que se produzca podría ser de carácter superficial”.
David Norris, gestor de TwentyFour AM
Según el diagrama de puntos de la Fed, Norris cree que podemos esperar que el tipo de los fondos de la Fed alcance el 3,75% en algún momento de la primera mitad de 2023 y que luego tenga una tendencia a la baja con una previsión a largo plazo del 2,50% a partir de entonces. Parece probable que la Fed siga subiendo los tipos durante el resto del año y no nos sorprendería que se detuviera a observar el panorama una vez que se alcance un tipo de fondos de la Fed del 3,50%.
En cuanto a las implicaciones para los mercados de deuda corporativa estadounidenses, el gestor de TwentyFour AM subraya que se ha producido un buen repunte en los mercados de deuda corporativa de EE.UU. desde principios de julio debido a varias razones técnicas y fundamentales.
Desde el punto de vista técnico, la cobertura de posiciones cortas, la falta de inventarios de los intermediarios y un mercado de nuevas emisiones debilitado han proporcionado un fuerte telón de fondo al crédito, especialmente porque también hemos disfrutado de un aumento de las entradas en la renta fija IG y HY. Unos fundamentales fuertes, como una sólida temporada de beneficios en el segundo trimestre, unos balances corporativos consistentes, unas tasas de impago bajas y una mayor gestión del pasivo corporativo, han hecho que los diferenciales del high yield corporativo retrocedan desde los recientes máximos de 600 puntos básicos hasta los actuales 460, y que los diferenciales de la renta fija internacional se recuperen de 167 puntos básicos hasta los actuales 145 puntos básicos.
A partir de aquí, la dirección del camino dependerá de la trayectoria de la inflación y de la política del banco central. Si la inflación sigue disminuyendo, esperaríamos que los diferenciales de los bonos high yield de EE.UU. llegaran a niveles más cercanos a los 400 puntos básicos. Sin embargo, si vemos una inflación persistente, con la que se esperan tipos de interés más altos durante más tiempo, esperaríamos un retroceso de los diferenciales de crédito hacia los máximos recientes, que sobre una base histórica representan un atractivo nivel de soporte para el crédito, concluye Norris.
Franck Dixmier, director de inversiones global de Renta Fija de Allianz Global Investors

Por su parte, Franck Dixmier cree que Jackson Hole será una oportunidad para que Jerome Powell reajuste las expectativas del mercado y reafirme su máxima prioridad de luchar contra la inflación. “Creemos que el mensaje de Jerome Powell debería ser claro y firme”, afirma.
“Jackson Hole debería ser una oportunidad para que el presidente de la Reserva Federal insista en su mensaje de halcón.
Franck Dixmier, director de inversiones global de Renta Fija de Allianz Global Investors
Ante una inflación tan elevada, que sigue siendo difícil de predecir a corto plazo, se espera que la Fed reitere su prioridad absoluta de luchar contra el alza de los precios y su voluntad de seguir endureciendo su política monetaria.
Los mercados, que anticipan un pico de subidas de tipos a finales de 2022, tendrían que revisar sus expectativas al alza, lo que podría provocar volatilidad.”
Luke Bartholomew, economista senior de abrdn

Un discurso del presidente Powell siempre será relevante, y parece que el de este año llega en un momento especialmente importante para el mercado, en opinión de Luke Bartholomew. La declaración de Powell del año pasado dio cinco razones por las que esperaba que la alta inflación fuera transitoria. Este año, es seguro decir que no va a repetir ese mismo mensaje, considera.
De hecho, añade el economista senior de abrdn, su discurso “puede implicar explícitamente un ‘mea culpa’ sobre las previsiones de la Fed como forma de intentar demostrar lo que han aprendido sobre la inflación este año”.
“Es probable que Powell subraye que la política aún tiene un largo camino por recorrer antes de que la Fed se sienta cómoda de haber recuperado la estabilidad de los precios. Esto es importante porque el mercado se ha comportado recientemente como si la Fed se hubiera alejado de su postura hawkish. Es difícil creer que la dirección de la Fed se sienta cómoda con la forma en que las condiciones financieras se han vuelto mucho más acomodaticias después del último mes. Por ello, Powell utilizará este discurso como una oportunidad para hacer frente a esta interpretación más dovish que ha surgido recientemente sobre la política de la Fed. Si no lo hace, los mercados lo tomarán como una luz verde para que los activos de riesgo sigan subiendo, lo que probablemente hará que la Fed tenga que aplicar aún más subidas de tipos de interés”.
Luke Bartholomew, economista senior de abrdn
Laurent Benaroche, Gestor de Multi Asset & Overlay de Edmond de Rothschild AM

El Simposio de Jackson Hole somete a los bancos centrales a una complicada misión. Como muestra del malestar en el ambiente, la presidenta del BCE, Christine Lagarde, ha sido sustituida por Isabel Schnabel, y el presidente del Banco de Inglaterra, Andrew Bailey, ha decidido no hacer declaraciones tras el evento.
Laurent Benaroche señala que la inflación de dos dígitos se está generalizando, los mercados laborales son fuertes, las condiciones financieras mejoran a pesar del endurecimiento monetario y los datos económicos se reducen lentamente, aunque los indicadores avanzados se desploman. En este contexto, el experto consider que los bancos centrales deberían reafirmar su determinación de aplastar la inflación y optar por unos tipos más altos durante más tiempo.
En opinión de Benaroche, en el último FOMC, la Fed fue bastante clara al afirmar que reaccionaría tras la publicación de los datos económicos y que abandonaría las orientaciones a futuro que considera inadecuadas para el entorno actual. El banco quiere anclar las expectativas de inflación al tiempo que reconoce que la política monetaria tiende a ir por detrás de las primeras señales alentadoras de inflación. En Europa, el BCE ya ha reconocido que sus modelos de previsión podrían ser inadecuados y que existe un riesgo de desanclaje de la inflación. El banco probablemente reforzará este mensaje, anticipa el gestor de Edmond de Rothschild.
“En consecuencia, cabe esperar una muestra de determinación junto con cierta modestia ante el sorprendente aumento de la inflación. En los últimos días, el posicionamiento del mercado ya ha reflejado esto. Es poco probable que la Fed arroje mucha más luz sobre la situación, pero quizás el BCE diga algo más”.
Laurent Benaroche, Gestor de Multi Asset & Overlay de Edmond de Rothschild AM