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¿Subirá el BCE los tipos más de lo que prevén los mercados ante el aumento de las expectativas de inflación?
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¿Subirá el BCE los tipos más de lo que prevén los mercados ante el aumento de las expectativas de inflación?

Es probable que el banco central siga considerando que los riesgos para las perspectivas de inflación a medio plazo son mayores que los efectos negativos del endurecimiento monetario sobre la economía real.
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13 MAR, 2023

Por Leticia Rial de RankiaPro

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Más subidas de tipos de interés en el horizonte. Este es el panorama que los profesionales de la industria de gestión de activos prevén de cara a las próximas reuniones del BCE. En líneas generales, las gestoras de fondos esperan que la entidad que preside Christine Lagarde vuelva a subir los tipos en 50 puntos básicos −como ya hizo en su última reunión el 2 de febrero−.

Son muchas las voces las que apuntan a que el Banco Central Europeo podría subir los tipos de interés más de lo que esperan los mercados ante el aumento de las expectativas de inflación. A continuación, puedes conocer la opinión de los expertos del sector ante lo que esperan que suceda en la reunión del BCE de este jueves 16 de marzo.

Rubén Segura-Cayuela, economista jefe para Europa de Bank of America

Creemos que el BCE va camino de un endurecimiento excesivo. Y las señales que hemos recibido esta semana nos mantienen muy preocupados por una probable reacción exagerada del BCE: la economía ha sido y sigue siendo débil, algunas presiones inflacionistas en ciernes van en la dirección correcta y es poco probable que la política fiscal proporcione un impulso inflacionista adicional (en todo caso, pronto podría dar un giro a peor).

Los hogares europeos se están viendo presionados a un ritmo sin precedentes, y el crecimiento del consumo real se está volviendo negativo. Los consumidores están pagando mucho más por lo mismo: mientras que las ventas nominales al por menor están más de un 20% por encima de los niveles anteriores a la crisis, los volúmenes de ventas están bastante cerca de los niveles anteriores a la pandemia. Y el panorama es similar si nos fijamos en las cifras de consumo privado de las cuentas nacionales. No podemos ser optimistas sobre las perspectivas del consumo en el futuro, ya que incluso cuando disminuya la presión sobre los ingresos reales, la repercusión de la subida de los tipos de interés se dejará sentir.

Esperamos una subida de 50 pb con, al margen, cierta orientación a 50 pb en mayo a menos que la inflación subyacente mejore antes. Es probable que las previsiones sean de línea dura (más a corto plazo) y de línea moderada (más a largo plazo). Con amplios intervalos de incertidumbre. Es posible que los desacuerdos internos no permitan a Lagarde mostrarse contundente: dado que la fijación de precios ya es de línea dura, vemos riesgos de que la lectura del mercado sea pesimista.

Jeremy Cunningham, investment director de Capital Group

El BCE podría subir los tipos más de lo que prevén los mercados ante el aumento de las expectativas de inflación. El Banco Central Europeo ha anunciado su intención de continuar subiendo los tipos de interés, alegando para ello una «importante revisión al alza de las perspectivas de inflación», y también ha señalado que comenzará a reducir los bonos adquiridos en el marco de su programa de compra de activos. La presidenta del BCE, Christine Lagarde, concretó los riesgos de inflación: a corto plazo, giran en torno a los precios de la energía y la trayectoria del conflicto entre Rusia y Ucrania, y a medio plazo, el riesgo principal es el aumento de las expectativas de inflación. Los datos de la última encuesta del BCE sobre las expectativas de los consumidores muestran un fuerte aumento de las expectativas de inflación a un año y un nuevo aumento de las expectativas a tres años (gráfico inferior). Esta situación podría aumentar las presiones salariales a medida que los trabajadores vayan asimilando el aumento de las expectativas de inflación, y apunta a la posibilidad de que el BCE decida subir los tipos en mayor medida de lo que espera el mercado.

Ulrike Kastens, economist europe para DWS

El Banco Central Europeo está lejos de alcanzar su objetivo de inflación en el medio plazo, por lo que, como ya se había previsto en la reunión de febrero, es probable que vuelva a subir los tipos de interés oficiales en 50 puntos básicos en su próxima reunión del jueves 16 de marzo, en la que el tipo de depósito se situaría en el 3%.

Los comentarios de numerosos miembros del BCE indican que ni siquiera esta subida de tipos supondría el final del camino. Es probable que la tasa de inflación subyacente, que subió al 5,6% en febrero, haya alarmado a los miembros del Consejo de Gobierno del BCE, sobre todo por las perspectivas de que siga subiendo. Por otra parte, el mercado laboral se mantiene sólido, los salarios subirán y la escasez de mano de obra también seguirá provocando ajustes salariales al alza. Sin embargo, también son visibles los primeros signos de desaceleración, la economía está perdiendo impulso lentamente y los préstamos, especialmente en el mercado inmobiliario, están disminuyendo de forma significativa.

No obstante, es probable que el BCE siga considerando que los riesgos para las perspectivas de inflación a medio plazo son mayores que los efectos negativos del endurecimiento monetario sobre la economía real. Esto debería reflejarse también en las previsiones de crecimiento e inflación. Se presta especial atención a la proyección de subidas de precios para 2025, que actualmente se estima en el 2,3%. Suponemos que las nuevas proyecciones también mostrarán un nuevo incumplimiento del objetivo de inflación. A este respecto, es probable que el mensaje central del BCE sea que seguirá dependiendo de los datos, pero que mantendrá fundamentalmente el rumbo de las subidas de los tipos de interés. En este escenario, esperamos que el tipo de depósito se eleve al 4% en el verano de 2023.

Cristina Gavín, responsable de renta fija en Ibercaja Gestión

Pocas sorpresas se esperan en cuanto a la cuantía del movimiento en la reunión de esta semana del BCE. La elevación en el tipo de intervención de 50 pb está más que descontada por el mercado y situará el tipo de intervención en el 3,50% (3% el tipo de depósito).

El interés de la reunión como suele ser habitual estará focalizado en el mensaje que transmita Lagarde en la rueda de prensa posterior acerca de sus previsiones de cara a los próximos meses. No obstante, las declaraciones a las que hemos ido asistiendo a lo largo de las últimas semanas no sólo por parte Lagarde sino por los diferentes miembros del Consejo de Gobierno del BCE han hecho que las probabilidades de una nueva subida de 50 puntos básicos en mayo ganen enteros, cuando hace apenas un mes, el mercado daba por cierta una subida de tan solo 25 puntos básicos. Este movimiento estaría justificado por los datos de inflación y empleo que hemos ido conociendo en los últimos meses y que situarían el tipo de depósito en el 3,50% (4% el tipo de intervención) antes de la llegada de los meses de verano.

Para las reuniones de junio y julio, aunque algún miembros más hawkish del BCE como el presidente del Banco de Austria ha defendido la necesidad de sendas subidas adicionales del 50 pb, a nuestro juicio, parece un movimiento demasiado agresivo ante el enfriamiento del ciclo económico al que estaríamos asistiendo, y en junio lo más probable sería ver una subida de 25 pb que llevaría el en el tipo de depósito hasta el 3,75%, situándose ahí el tipo terminal a día de hoy.

Peter Goves, analista de renta fija de MFS IM

Se espera que el BCE suba los tipos de interés 50 puntos básicos hasta el 3% esta semana. En la reunión anterior ya se adelantó algo al respecto, por lo que no será una sorpresa. Lo más importante será el discurso sobre el futuro (es decir, la posibilidad de nuevas subidas de 50 puntos básicos) y las nuevas proyecciones macroeconómicas del BCE.

En general, esperamos que en el futuro el compromiso dependa de los datos. Aunque la inflación general está bajando, la subyacente parece más persistente. Así pues, el BCE sigue teniendo la clara misión de reducir la inflación desde los elevados niveles actuales. La incertidumbre en torno a las perspectivas de inflación sigue siendo elevada, lo que quizá haya influido en parte en el rebasamiento del mercado, junto con los factores mundiales.

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