La labor del selector de fondos ha evolucionado en los últimos años, adquiriendo una importancia cada vez mayor. De estos cambios han hablado Marta Díaz-Bajo, socia y directora de análisis de fondos en atl Capital, Patricia Gutiérrez, responsable de selección de fondos y ETFs de renta fija y fixtos en BBVA Quality Funds, e Iratxe Oria, directora de inversiones en Gestifonsa, en la Morningstar Investment Conference −celebrada por primera vez en formato digital−. Las selectoras de fondos también han aprovechado para analizar los factores que toman en cuenta a la hora de elegir fondos de distintos tipos de activos.

Evolución de la labor del selector de fondos en los últimos cinco años
Marta Díaz-Bajo, socia y directora de análisis de fondos en atl Capital, sostiene cómo su labor de selección de fondos ha cambiado en estos últimos años y hay aspectos que han ido a mejor y otros a peor. “En algunas cosas no ha cambiado porque tenemos mucha tecnología, en parte gracias a Morningstar, tecnológicamente ha habido un avance. En otros aspectos sí que quizás es más complicado, el número de fondos de inversión se ha incrementado mucho, la coyuntura económica cambia y siempre tenemos retos que afrontar”.
“En estos años hemos vivido la aparición de muchos fondos de inversión y gestoras, por lo que llegar a todos es complicado; lo que a su vez nos ha obligado a ser mas exhaustivos”, apunta Patricia Gutiérrez, responsable de selección de fondos y ETFs de renta fija y fixtos en BBVA Quality Funds. Para Iratxe Oria, directora de inversiones en Gestifonsa, ha habido un cambio en línea con lo que es la gestión en general, es una gestión mas personalizada. “Hemos pasado a fondos más nichos, productos más específicos, con áreas mucho más concretas de inversión; lo que ha provocado que el selector se haya tenido que especializar más. Tenemos carteras con más estrategias pero más concentradas de lo que eran hace unos años”. Todo esto está cambiando mucho el perfil del selector. Durante los últimos meses comentan qe han recibido mucha cantidad de información y lo valoran como algo positivo, pero no creen que haya cambiado la estructura en su manera de trabajar.
Otro de los temas tratados en la Morningstar Investment Conference ha sido el hecho de que existan fondos más difíciles de analizar que otros. En este sentido, Marta Díaz-Bajo señala los mixtos flexibles, ya que el valor que pueda aportar el gestor puede provenir de muchas variables y le resulta algo complicado. “Nosotros hemos ido abandonando este tipo de fondos y nos hemos enfocado en fondos más específicos”, puntualiza la experta. “No es tanto el tipo de fondo sino la información que tienes sobre él. No cabe duda que cuanto más flexible es el fondo, añade dificultad”, señala Patricia Gutiérrez. Desde Gestifonsa comentan cómo es más difícil controlar fondos que depende de parámetros cuantitativos, “falta tener esa historia del fondo, es decir, qué está persiguiendo el gestor con esa cartera”, comenta Iratxe.
Gestión activa vs. gestión pasiva
En los últimos años hemos asistido a la irrupcion de la gestión pasiva: fondos de gestión pasiva, ETFs…, algo que desde atl Capital ven con muy buenos ojos porque les ayuda en ciertos activos que son muy eficientes; a la hora de construrir una cartera de inversión a los clientes les facilita mucho la tarea. “Lo que pasa es que no te quita trabajo porque hay mucha oferta. El hecho de apostar por determinados productos de gestión pasiva no nos ha quitado más trabajo de selección“, declara Marta.
“En ocasiones te permite estar expuesto en mercados nichos que vía fondos de inversión es más complicado. Un momento clave en el que se ha visto complementariedad de la gestión activa y pasiva ha sido lo que hemos visto en marzo. En la parte de renta fija el ETF te ofrece mucha diversificación por país“, sostiene Patricia.
Para Iratxe la gestión pasiva es algo complemetario, nunca sustitutivo, y su uso depende mucho del momento de mercado. “Años como el 2020 ha demostrado la necesidad de la gestión activa y una selección de determinados posicionamientos. Es más bien cortoplacista, no son posiciones estratégicas”, concluye.
Una de las preguntas planteadas por Fernando Luque, Senior Financial Editor de Morningstar y moderador del evento, ha sido la de definir qué es un fondo excelente para cada una de las selectoras de fondos. “Aquel donde el equipo gestor te ha contado su proceso de inversión y luego se comporta como te lo han contado”, sostiene Marta Díaz-Bajo. Sin duda, la opinión de un selector de fondos será diferente a la del inversor final, quien esperará que un fondo excelente sea aquel que le genere rentabilidades extraordinarias.
“Al final todos sabemos que no hay un fondo que siempre lo vaya a hacer bien, y si lo hay habrá que estar alerta”, dice Patricia Gutiérrez. Para ella es muy importante la consistencia y que el discurso sea coherente, es decir, lo que dice el gestor frente al comportamiento del fondo. También hay que tener encuenta otro aspectos importantes como, por ejemplo, el proceso de due diligence. “La excelencia es la mayor rentabilidad con la menor unidad de riesgo, y que ese riesgo sea conocido y descontado por el gestor, algo con lo que ya cuentas de antemano porque te lo ha contado”, comenta Iratxe Oria.
Motivos por los desprenderse de un fondo
Para Marta la principal razón para vender un fondo de inversión reside en “si el fondo en cuestión no se ha comportado como esperabas o el equipo gestor ha hecho cosas que no nos había contado que iba a hacer“. También depende de otros condicionantes externos como, por ejemplo, una salida brusca de dinero y que el gestor se ponga nervioso y haga movimientos raros.
En definitiva, cuentas con unos factores ajenos al gestor (como es el caso de la disminución patrimonio) y luego está el tema de la pérdida de consistencia. “Son muchos años los que estamos en contacto con los gestores y al final acabas entendiendo al gestor, si ves momentos como los de ahora en los que las rentabilidad son más bajas, entiendes que pueda tomar mayor riesgo −en otro momento no−”, explica Patricia.
Iratxe apuesta por deshacerse de un determinado fondo de inversión cuando la cartera no se corresponde con el discurso que el gestor está trasladando. “Preferimos un fondo que se comporte mal pero que siga su política de inversión“, aclara.
En los últimos años hemos visto en la industria de gestión de activos una tendencia a que bajen los costes de los fondos de inversión, algo que viene marcado por la presión del regulador y el cliente. “Habría que rebajar la obsesión que tenemos con las comisiones. Estamos viendo como ante una propuesta que aporta calidad el cliente te dice que le parece caro solamente mirando el coste”, explican desde atl Capital. “Nosotros analizamos los fondos y tenemos otro departamento que se encarga de mirar las comisiones”, sostienen la selectora de BBVA Quality Funds. Por último, en Gestifonsa “no se trata de un parámetro previo a la hora de seleccionar un fondo, pero sí que es cierto que lo miramos comparando unos fondos con otros”.